Atlético de Moncloa 7 - 3 Rápido de Bouzas

18 de mayo de 1960. El Real Madrid alzaba su quinta Copa de Europa consecutiva al vencer al Eintracht de Frankfurt por 7-3 en la que para muchos es la mejor final de la historia de la competición. Puskás (4 goles, incluyendo uno de penalti) y Di Stéfano (3 goles) fueron los héroes de aquella final y se convertían así en inmortales para la afición madridista. La Elipa no contaba con los 135.000 espectadores de Hampden Park, pero sí que lo hacía con la presencia de D. Antonio Hita, Miriam, María y Ferdy y, aunque no tenemos en nuestra filas a Di Stéfano ni a Puskás, contamos con nuestros propios héroes.